El bruxismo es el trastorno que se caracteriza por el rechinamiento o apretamiento de los dientes, especialmente durante el sueño. El bruxismo puede ocurrir tanto en adultos como en niños y puede ser causado por factores como el estrés, la ansiedad, la depresión, el consumo de ciertas drogas o la ingesta de alcohol. También puede estar relacionado con problemas de la mandíbula o con la forma en que los dientes se encajan.

El bruxismo puede causar dolor de cabeza, dolor en la mandíbula y dolor facial, así como fatiga y sensación de tensión. También puede afectar la estructura de los dientes y aumentar el riesgo de problemas de encías y de pérdida de dientes.

Para tratar el bruxismo, el dentista puede recomendar la colocación de una férula o guarda dental para proteger los dientes mientras se duerme. También puede recomendar ejercicios de relajación o terapia para ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad. Si el bruxismo está relacionado con problemas de la mandíbula, es posible que el dentista o el médico recomienden un tratamiento especializado.

Es importante tratar el bruxismo para evitar daños a los dientes y a la mandíbula y para aliviar los síntomas desagradables que puede causar. Si sospechas que tienes bruxismo, habla con tu dentista para obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuados.

Bruxismo es el término que hace referencia a la acción incesante de rechinar y cerrar los dientes sin intención de hacerlo y en momentos inadecuados.

Las personas que padecen de bruxismo a menudo no se dan cuenta de que han desarrollado este habito y que no saben que el tratamiento está disponible hasta que se han dañado la boca y los dientes.